Reivindiquemos el cake de banana!

También podés ver esta receta en nuestro nuevo blog: www.notonlysaladblog.com


Hay quien odia el cake de banana y hay quienes lo aman, pero hay un punto intermedio de gente que tiende a evitarlo por experiencias pasadas.  A ustedes me dirijo, queriendo hacerlos amigos nuevamente de una delicia que no tendrían que pasar por alto a la hora de la merienda (o desayuno, por qué no?).

Además, está bueno poder aprovechar esas bananas maduras que ya nadie quiere comer, pero si te entusiasmaste con la receta antes de que las tengas a punto, fijate acá cómo madurarlas rápido!

La receta rinde un pan de 28 x 11 x 8 cm, suficiente para 12 porciones.

320g banana madura, pisada (aprox 3 bananas, pero podés usar entre 2 y 4)

1 Cda jugo de limón

210 g harina (1 3/4T)

1/2 cta polvo de horner

1 cta bicarbonato de sodio (lo encontrás en tiendas de repostería y mayoría de farmacias)

1/2 cta sal

210g azúcar (1 T + 1 Cda)

1 huevo

70 ml aceite (1/4 T + 1 cta)

50g nueces tostadas y picadas grueso (opcional)

1. Precalentá tu horno a 180ºC.

2. Enmantecá y enhariná un molde para pan rectangular (yo uso uno con las medidas antedichas), golpeteando el molde boca abajo para retirar el exceso.

3. Pisá las bananas en un plato hondo y mezclá con el jugo de limón.

4. Tamizar juntos la harina, polvo de hornear, bicarbonato de sodio y sal. Reservar.

5. Batir a velocidad media (con batidora eléctica o de mano) el azúcar, el huevo y el aceite. Incorporar el puré y homogeneizar.

6. Agregar la mezcla de secos reservados. Éste es el momento de agregar las nueces si vos querés.

Hornear aproximadamente 50 minutos, dependiendo de tu horno. Enfriar en el molde, pasar un cuchillo por los lados y dar vuelta sobre un plato retangular. Al principio es muy tierno, pero lo bueno que tiene es que pasados los días queda más firme para cortar y nunca se pone seco/duro.

Tip: cuando esté bien frío lo podés envolver en film y congelar. Yo, cada vez que quiero una porción, corto una feta y la tuesto en la tostadora hasta que esté ligeramente quemado. Ese "quemadito" es en realidad caramelización de los azúcares, y queda crocante por fuera y tierno por dentro.

Para un té, lo espolvoreo con azúcar impalpable o le hago un glaçage que se endurezca un poquito (mezclá 1 T de azúcar impalpable con aprox 3 Cdas agua hasta obtener una mezcla firme pero que se pueda esparcir). 

Contame qué te parece la receta! Tenés dudas? Has tenido malas experiencias?